Fellini pronosticó el fin de la cinematografía por la televisión. "Roma", un film hecho para la pantalla chica demuestra lo contrario, es un nuevo comienzo, una nueva historia.
En una producción de Netflix de Alfonso Cuarón, que nos muestra las relaciones humanas en un contexto social crudo y desapasionado de un México de los años 70, donde tenemos la oportunidad de observar el mejor nivel de cine en una historia hecha para televisión.
Fellini pronosticó el fin de la cinematografía por la televisión. Este film hecho para la pantalla chica demuestra lo contrario, es un nuevo comienzo, se inicia una nueva historia. Con el encuadre y la filmación de cine, Cuaron describe con minucioso detalle lo que puede ser considerado un film autobiográfico, por los detalles ambientales, históricos y culturales de su vida. Mejico y el mundo, pues las diferencias sociales, la lucha por un espacio con derechos, el matriarcado, el feminismo, el derecho a la vida, la decadencia del machismo (justamente en Mejico), las luchas estudiantiles,el lenguaje y los dialectos en la comunicacion, el abandono y la muerte que no solo pertenecen a un país, son temáticas universales.Y fundamentalmente la narración lineal y descarnada del siglo veinte y veintiuno. La historia nos muestra a dos mujeres, de distinto nivel social, abandonadas por sus parejas, que consiguen tomar las riendas de su vida y de los que las rodean, y se imponen con esperanza ante el futuro. Presenta homenajes a Fellini, con el ridículo maestro de artes marciales y las bandas circenses de musica, a Hitchcok con sus mensajes MacCaffin sobre el riesgo del mar y los temblores de la tierra en la narración. La pelicula es en blanco y negro (Igmar Berman), como deben ser los recuerdos y tal vez los sueños y la música alegórica acompaña desde el fondo, con los ladridos de Borras (el perro), las tareas rutinarias familiares tan parecidas a la vida misma.